martes, 5 de septiembre de 2017

Lucha entre Moros y Cristianos por el control de Elche

Lucha entre Moros y Cristianos por el control de Elche
Las embajadas han escenificado la lucha de ambos pueblos por la toma de la ciudad

I. J. Iniesta 10.08.2017 | 04:01
Lucha entre Moros y Cristianos por el control de Elche
Lucha entre Moros y Cristianos por el control de Elche
Las embajadas mora y Cristiano han escenificado esta noche la lucha por el dominio de la ciudad entre ambos pueblos. Un espectáculo que se ha celebrado, un año más, en el Palacio de Altamira, y que ha congregado a decenas de ilicitano a para contemplar la representación.

Cerca de 150 comparsistas han dado viva al espectáculo, en una celebración organizada exclusivamente por los Moros y Cristianos de la localidad.

El bando moro ha sido el primero en tomar la ciudad tras una intensa batalla para, posteriormente, ser reconquistada por los cristianos, esta vez de forma pacífica.

La lluvia ha dado tregua al espectáculo hasta el final de l embajada cristiana, cuando ha empezado a chispear, aunque el evento ha continuado con normalidad. 


(NOTICIA Y FOTO PUBLICADA POR EL DIARIO INFORMACIÓN)

domingo, 4 de septiembre de 2016

Tiempo de reconquista




Moros y cristianos
Tiempo de reconquista
Las embajadas recrean la lucha entre los bandos de la cruz y la media luna para hacerse con el control de Elche

JOSÉ A. MAS/ FOTOS Y VÍDEOS: SERGIO FERRÁNDEZ 11.08.2016 | 01:07
Tiempo de reconquista
Tiempo de reconquista en les festes d´agost de Elche
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Con el Palacio de Altamira como escenario, las tropas cristianas lograron ayer recuperar la ciudad ante el público que disfrutó con los efectos especiales de la batalla.

La majestuosidad del Palacio de Altamira envolvió ayer por la noche uno de los actos más vistosos y característicos de los Moros y Cristianos de Elche. Con la participación de 200 festeros, la zona de Transpalacio acogió las embajadas de las fiestas.

La representación arrancó con el disparo de arcabuces, recordando el Alardo que se había celebrado por la mañana, dando comienzo una representación histórica que este año contó con más público, en las gradas y por los alrededores, gracias al adelanto de su inicio en un hora respecto a los años anteriores.

Una vez que el campanario de la basílica de Santa María marcó las 22 horas arrancó un espectáculo en el que el conflicto entre moros y cristianos fue el protagonista, y donde acabó reinando el diálogo y el entendimiento, por el bien de todos los pueblos.

La organización volvió a apostar por la aparición de monjes al inicio de la representación, mientras una voz trasladaba al público hasta la época de la Reconquista, en el siglo XIII. Este año se ha tratado de mejorar la recreación de los poblados que aparecen al inicio de las dos embajadas, primero cristiano y después moro, trabajando en la confección de nuevos decorados, para dar más vistosidad a las embajadas.

Los espectadores pudieron ver un mercadillo en el poblado con personas de todas las edades, así como nuevos establecimientos, entre ellos una taberna. Elementos que pretenden mejorar la escenificación apoyándose con el entorno que crea la zona presidida por el Palacio de Altamira. También se recreó una escena de niños atendiendo a las explicaciones de un maestro.

La primera de las embajadas, la Embajada del Moro, escenificó en Transpalacio la toma de la ciudad por parte del bando de la media luna. El embajador moro solicitó al centinela, mientras iban llegando sus tropas, la presencia del alcaide, que salió del castillo acompañado por el embajador cristiano. Tras un parlamento en el que los moros exigían a los cristianos recuperar el control del castillo la tensión se elevó. Una tensión que llevó al embajador cristiano a romper el documento que plasmaba las peticiones de los moros. Así arrancó la batalla que acabó con la muerte del embajador cristiano, a manos de los soldados moros, y la toma del castillo por parte de las tropas de la media luna.

La lucha entre los dos bandos estuvo presente con un gran realismo, gracias a la interpretación que cada año tratan de mejorar los festeros que participan en las embajadas. Sin duda se trató de uno de los momentos con más acción de las embajadas, en los que no faltaron las llamas de fuego y el humo que salían del castillo, para dar más realismo a la acción bélica entre moros y cristianos, que se vio enfatizada con la música.

En la segunda parte de la representación, la Embajada Cristiana, se recreó la Reconquista, que devolvió a Elche a la Corona de Aragón. En ella moros y cristianos dialogaron y acordaron la conveniencia de que la villa se sometiese al control del rey cristiano, como acabó sucediendo.

La representación finalizó con la llegada a la escena del Rey Jaume I, que tomó posesión de la ciudad tras firmar las capitulaciones que pusieron fin a la etapa del califato árabe con su rendición ante las tropas de la cruz.

El papel del Rey Jaime I fue representado por el festero Miguel Olivares. Como embajador moro intervino Salvador Castaño, mientras que el embajador cristiano fue Juan José Álvarez. El papel de embajador de la Corona de Aragón corrió a cargo de José Manuel Botella.

En la embajada volvió a quedar constancia de la vistosidad de los diferentes trajes que presentaron los festeros, que, apoyados por el entorno del castillo, la iluminación y el sonido, trasladaron a los espectadores a la época de la Reconquista.


(NOTICIA Y FOTOS PUBLICADAS POR EL DIARIO INFORMACIÓN)






viernes, 21 de agosto de 2015

La ciudad vuelve a ser cristiana

La ciudad vuelve a ser cristiana La batalla entre el bando de la cruz y el de la media luna, en el Palacio de Altamira, maravilla a los cientos de ilicitanos que presenciaron el fin del califato árabe - El Rey Jaume I, representado por Cristobal Manzaneque, recupera la fortaleza PEPE MÁRQUEZ/ FOTOS: SERGIO FERRÁNDEZ 10.08.2015 | 11:43 La ciudad vuelve a ser cristiana Ver Galería La ciudad vuelve a ser cristiana Más vídeos La leyenda de la Reconquista volvió anoche a tomar las calles de Elche. Junto al Palacio de Altamira, lugar que acoge la celebración de este clásico encuentro en las Fiestas de Agosto, se desarrolló el conflicto entre el banco de la cruz y el de la media luna, que conmemora la celebración de la victoria del reino de Jaime I tras la larga estancia de los musulmanes en la sur de la península. La ciudad se sumergió durante un periodo de tiempo en el ambiente de las batallas y la invasión de terrenos que caracterizaron al siglo XIII. Cientos de ilicitanos y visitantes se acercaron hasta Traspalacio para presenciar el acto de la Embajada mora primero (donde los musulmanes toman la ciudad), y la cristiana a continuación con la reconquista de Elche. Un evento que contó con una batalla que rozó un realismo extremo e integró a los allí presentes en el mismísimo mundo de la época de los caballeros medievales. La lluvia, que hizo acto de presencia en la primera parte del acto, no impidió que éste se desarrollase pero sí restó algo de público y propició algún resbalón en el combate. La segunda parte rememoró el final del califato árabe, con la entrega de la fortaleza del Palacio de Altamira, símbolo de poder y gobernabilidad, a las tropas cristianas encabezadas por la figura del Rey Jaime I. Para esta ocasión, el acto estrenó nuevo rey. Se trata de Cristóbal Manzaneque que, en sustitución del anterior que ostentaba el cargo, Juan Sempere, se encargó de sumergir a los ilicitanos en la época medieval con su entrada en la fortaleza. Los trajes pusieron la nota de color al evento, ensalzados con elementos que fascinaron al público, como el fuego, las distintas armas que empuñaron los guerreros a lo largo del conflicto y los fuegos artificiales que llenaron de pólvora y sonido la Reconquista cristiana. El evento terminó con la llegada del Rey Jaime I a la ciudad para tomar posesión de la fortaleza ilicitana y firmar las capitulaciones, ante la atenta mirada de los vecinos y visitantes que se congregaron en los alrededores del Palacio de Altamira y que disfrutaron de la espectacularidad de la representación festera. La entrega de la llave del municipio al Rey Jaime I supuso la victoria del ejército cristiano que devuelve la ciudad de Elche a la Corona de Aragón, tras varios siglos bajo el dominio musulmán. (NOTICIA Y FOTO PUBLICADA POR EL DIARIO INFORMACIÓN)